La organización de ‘Supervivientes 2025’ activa de urgencia el protocolo de abandono: “Yo me piro, esto es lamentable”

Entraba a ‘Supervivientes 2025’ creyendo tener el mundo a sus pies tras haberse hecho viral por un esperpéntico momento en ‘La isla de las tentaciones’ en el que veía a su pareja, Anita Williams, serle infiel, decidiendo correr por la playa para ir en su busca. Hablamos de Montoya, andaluz al que Telecinco decidió seguir sacando partido y llevarle a ‘Supervivientes 2025’, donde no ha conseguido obtener el cariño de sus compañeros debido a sus comportamientos y constantes mofas hacia ellos, algo que también estaría cansando cada vez más a la audiencia, que no le deja precisamente en buen lugar en redes sociales. Este parece ser cada vez más consciente de su situación y en las últimas horas generaba un enorme drama en Honduras, asegurando que quería marcharse.

Montoya quiere irse de ‘Supervivientes 2025’

Todo comenzó por el reparto de comida, en el que a Terelu Campos, que acaba de regresar a Cayos Cochinos por segunda vez en esta edición, le dejaban el pez más pequeño. “Aquí no se puede anteponer que Terelu coma más o menos… a mí no me parece, porque aquí somos todos iguales. Yo tengo opinión y yo digo que Terelu es una concursante igual que todos”, decía Montoya al resto de compañeros, algo que no es del todo cierto ya que la tertuliana es una participante, no siendo concursante de pleno derecho como los demás y llevando menos tiempo en la isla. Finalmente no le hicieron caso y este estallaba con Anita y Carmen, sus grandes aliadas.

“No entendéis lo que yo he opinado, ¿no? ¿No lo entiendes? Yo me piro, esto es lamentable”, comenzaba diciendo, añadiendo que él “no siente nunca que mis opiniones… mis opiniones no valen para nada, mis opiniones van al retrete, todas, da igual...”, decía, sacando ese lado dramático que tanto le gusta explotar. Anita intentaba explicarle que está en una convivencia y que tiene que escuchar a los demás y otras opiniones, que no siempre son como la suya, pero él insistía.

“Yo soy el que condiciono, soy el manipulador, soy el que da las opiniones… ¡yo soy el que está nominado! Nada, pues yo me iré por ser una persona egoísta, por ser una persona mala y que no comparte… pero nunca recogeré cable ni delante ni detrás. ¡Mojarse es lo que hay que hacer!”, continuaba diciendo, lo que podría tratarse de una técnica para victimizarse ahora que está nominado junto a sus dos compañeras y podría salir a la calle este jueves.

El de Utrera decidía irse a una zona más apartada para continuar quejándose: “Qué asco, que descarado… no se interesa nadie por mí…”, decía mientras Anita se acercaba a él para intentar hacerle entrar en razón.

“¡Déjame en paz! Nadie se preocupa por mi por mi preocupación. A mí nadie me viene a preguntar, ni tu amigo Borja”, le echaba en cara a su ex, añadiendo que él “no condiciono a nadie, que la gente hable con quien quiera hablar, pero conmigo no habla nadie porque no quieren nada conmigo…”, se lamentaba.

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Escassi le hace entrar en razón

Esto provocaba incluso un enfrentamiento entre Anita y Carmen, que no sabía si debería ir a intentar hablar con él, siendo finalmente Álvaro Muñoz Escassi el que consiguió hacerle entrar en razón y tranquilizarle.

"Cuando te pasen cosas malas, de cabreo, malestar… hazte una reflexión. ¿Te acuerdas por que te cabreaste el sábado pasado?", le preguntaba el jinete. La respuesta era negativa por parte de Montoya. "¿Y sabes por qué? Porque no es importante tío, por eso no te acuerdas".

"Lo mío no son cabreos, lo mío viene de… es una situación de persona, cada uno es diferente", insistía el andaluz, ante lo que su compañero le instaba a "gestionarlo de otra manera…", le pedía. "Yo creo que tengo un problema en mi vida que es esperar cosas de los demás que no. Yo tengo una forma de convivir, de ser, de sentir…", respondía. "Bueno, pues gestiona la situación diferente, que no te afecte tanto en tu vida", sentenciaba Escassi.

Playa Magna, el lugar de la discordia

Sin duda, son tiempo duros para los robinsones, que llevan un tiempo unificados desde que desapareciesen Playa Calma y Playa Furia para dar paso a Playa Magna, donde todos sus problemas han terminado de explotar. Se trata de una zona bastante pequeña, lo que no todos llevan bien, entre ellos Montoya, que hace poco aseguraba que ''esta playa es muy escueta, parece que estamos en una discoteca, pegados y no tenemos esa tranquilidad''.

Carmen define esta unión de todos ellos como “una locura” y Pelayo tiene claro lo más difícil de este momento: ''Nos encantan las almendras a todos, y siendo tantos buscar almendras para compartir se está convirtiendo en una tarea ardua tarea, pero lo estamos consiguiendo, estamos rebuscando''.